Con el auge de internet y de las redes sociales vimos cómo, en un mundo cada vez más provisto de dispositivos móviles, se proporcionan contenidos y se fomenta la interacción con ellos cada vez con mayor inmediatez e influencia. Tanto que, para tu marca, la ausencia en estas plataformas podría costarle muy caro: hoy, si no estás abrazado a ellas, no existís. Pero, a su vez, las nuevas exigencias dan cuenta que con solo estar no alcanza: hay que saber estar, saber cautivar y saber interpelar. En consecuencia: planear una buena estrategia de marketing de contenidos para trascender.
Ya lo hemos advertido en otras oportunidades: la industria del turismo atraviesa un proceso de constante crecimiento y transformación. Es decir, debido a que las prácticas vinculadas a la actividad turística se modifican, alteran o cambian su forma, las empresas que quieran posicionarse a la vanguardia y no quedar atrasados frente a la competencia deberán adaptarse a las nuevas demandas de los viajeros. Hoy en día, las personas buscan en el viaje una experiencia vacacional significativa, trascendental, que involucre a productos más novedosos y a la posibilidad de percibir nuevas sensaciones, tanto en destinos sumamente popularizados como en lugares no tradicionales.
Es decir, podríamos concebirlo como una nueva dimensión de consumo, más explícita aún tras un año en el que la salud y seguridad sanitaria jugaron un papel determinante a la hora de planificar y concretar viajes, en la que se encuentran cada vez mayores exigencias, mayores competencias e incluso públicos cada vez más amplios. Fundamentalmente, se trata de una etapa arraigada a la idea de vivir experiencias más que de adquirir bienes.
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¿Qué importancia tienen la imagen y la estética?
De por sí, es importante destacar que el diseño de experiencias turísticas permite destacar, diferenciar y dar mayor valor a un producto en cuestión, orientando precisamente la oferta a las necesidades de un público objetivo. Los usuarios querrán saber qué podemos ofrecerle como destino turístico, complejo hotelero, parque de atracciones, agencia de experiencias en turismo. Para alcanzar ese principal propósito de la demanda hacia cada una de esas experiencias, es importante priorizar la imagen y la estética con la que se presentan.
Y es que nunca mejor aplicado el dicho de que “hay que ver para creer” o esa expresión de que “todo entra por los ojos”: en el caso de los viajes, se necesita de una comunicación visual atractiva y asertiva, ya que la imagen, y más aún la que se encuentre disponible en Internet y/o redes sociales, se convierte en el primer nexo con el potencial cliente. ¿Por qué asertiva? Porque está asociada a la inteligencia emocional y apela a la capacidad para comunicarse de forma armoniosa y eficaz con los demás.
Los nuevos comportamientos que han adoptado los viajeros de cara a la presencia y expansión de un mundo cada vez más conectado, suponen que la tecnología se encuentra constantemente disponible en y para cada una de las fases que conforman la experiencia de viajar. Como ser, a la hora de imaginar, inspirarse y/o generar preferencia por un destino, producto y/o servicio turístico, es decir previo al viaje, los turistas consumen imágenes disponibles en la web que dan cuenta de mundos atractivos y motivaciones, registrando una mayor atracción por viajar hacia el lugar admirado a través de un dispositivo móvil.
Entonces… ¿cómo interpelar acerca de una experiencia vacacional?
¿Por qué es importante potenciar la imagen de una experiencia turística si queremos atraer a potenciales viajeros? Porque, tal como indicamos anteriormente, las formas de viajar están cambiando conforme avanza el mundo de la tecnología y surgen herramientas que ponen al servicio de los usuarios la posibilidad de elegir sin necesidad de ser un experto, ya que todo atrae desde lo visual.
Hace no más de diez años, los viajeros que querían irse de vacaciones recurrían a un agente de viajes profesional que diseñaba un cronograma soñado de acuerdo a los gustos e intereses de las personas contratantes. Hoy en día, los propios usuarios nos hemos convertido en garantes de nuestro mejor descanso: tenemos a disposición infinidad de oportunidades para ir en busca de los mejores destinos, los mejores alojamientos, las mejores excursiones, la mejor gastronomía, y todo en función de nuestros gustos, pretensiones y prioridades. En ese sentido, tu empresa no puede desconocer la gran variedad de herramientas que tiene a disposición para lograr una imagen turística de calidad, priorizando siempre el interés y satisfacción del público objetivo.
Las redes sociales han provocado un giro rotundo en cuanto a la relación con el cliente y de allí la actividad turística puede obtener grandes ventajas para ofrecer al usuario la mejor experiencia vacacional, o al menos “tentarlo” a partir de recomendaciones, inspiraciones y sensaciones.